Pues nada, que tengo la cabeza un poco espesa este lunes y no hago más que perder el tiempo en el curro. Así que voy a aprovechar para
escribir la crónica de lo que ha sido el finde.
De Ostargi aparecimos: Gorka, Juan Maiza, Iñigo M, Angel Pérez y yo mismo. El domingo también apareció Ion Mikel.
Bueno, para empezar las previsiones eran dudosas. El sábado daban N flojo y poco techo y el domingo SW fuerte (no tanto según otros) y
mucho techo. Así que la Liga Norte se decidió por ir a Oña, despegue de Tablones para el sábado y Barcina para el domingo.
El sábado llegamos y estamos poquitos, sólo 19 pilotos. En el despegue no somos nada optimistas, atmósfera muy calmada y buitres que no giran nada. Además poco viento, así que lo de hacer ladera tampoco. Al final se pone una prueba de unos 44 kms con start-point a las 16:00, a ver
si a esa hora el sol calienta más.
Total que la gente sale y para abajo, buscando buscando, hay poca cosa. Yo salgo y tiro a la derecha, justo lo contrario al resto y encuentro un +0,4 cutre que te cagas. Pero es que es lo mejor que hay, así que enseguida subo 50 m y todo el mundo se viene para acá, pero muy bajo. En 5 minutos todos pinchados, excepto Gorka y yo.
Con toda la ladera para nosotros, vamos girando las cosas flojas que hay y aguantando. Hasta que a las 16:50, así, como de repente, una
térmica me sube a 1900, 800m sobre el despegue. Joer, que alturón!!!!
A partir de ahí a gozarla. Siguen las térmicas flojas, como mucho de +2, pero más anchas y suben alto. Así que nos ponemos a seguir a la
flecha del GPS, los 2 solitos y cada uno a su bola.
El cielo completamente azul, la térmica suave y una gran visibilidad, permiten girar y disfrutar del paisaje. Yo he salido en manga corta y
se está super-agusto.
Cuando llevamos 30 kms de prueba, Gorka engancha la ladera de Tablones, que es el camino lógico, pero yo no llego así que me voy a
unas lomas encima del Ebro y llego bajo. Busco sol y sotaventos, a ver si sale algo, y al final sale un termicazo, que al poco se convierte
en un +4 de gozada. Mientras subo feliz, veo como Gorka cae como un yunque y aterriza. Ni él ni yo nos creemos que la ladera de Tablones
no haya funcionado. ¡¡Increíble!!
Bueno, la térmica me sube a 2000, estoy solo en el aire y disfrutando como un enano. Así que sigo con la prueba. Por hacer algo, porque
pensaba que la manga no iba a valer (cosas de no leerse el reglamento). Vuelvo al aterrizaje oficial (penúltima baliza) con altura y enfilo hacia la última baliza, un pueblo en el valle. Voy todo confiado y pasa lo que pasa cuando te confías. Llego muy bajo a la baliza, la marco, y me dice que para llegar a gol necesito fineza
17. Necesito subir. Pero no hay nada, así que intento hacer ladera para llegar, pero no lo consigo y me quedo a 2 kms de gol. Arggg!!!!
Bueno, aquí es cuando viene la presión mediática. Que si la manga sí vale, que si te pones 2º, que si estás a 300 puntos de Iván Colás (que
no ha venido porque está en el Campeonato de Europa), que si mañana….., que si el descarte….., que si los números…….ufff,
qué presión!!!!!
Total, vamos a tomar unas cañas y a cenar tranquilamente y mañana ya se verá.
Domingo, calor asfixiante. Subimos al despegue de Barcina y el viento no es mucho, pero tampoco poco. O sea, que el viento puede ser
protagonista. Pues no, los verdaderos protagonistas fueron los cirros,
esas nubes altas que velan el cielo. Y no eran pocos. Total, que prueba de 56 kms, viento en cola. Por lo menos el viento no va a más.
Siguiendo con la presión mediática, cada uno me decía una cosa y ya tenía la cabeza como un nido de pájaros. Así que me quedé con una
cosa, si alguien hace 15 kms, la manga es válida. Eso y no cagarla es mi única opción de ganar la Liga Norte. Mis rivales, por detrás son
Robert, Xabi y Txus. Así que si alguno lo hace bien, también puede ser suya.
Total que nadie quiere despegar, pero en cuanto salen un par de pilotos, vemos que en la ladera se aguanta, gracias al viento y a unas
térmicas miserables. Vamos saliendo y despacito haciendo algunos kilómetros, siempre con 50-100 metros sobre la cresta, cuando no, por
debajo de ella. Todo el mundo asegurando y a ratos raspando las paredes. Algún intento de buscar fuera no sale bien y hay que recular
a la ladera.
El grupo de cabeza trinca en el Portillo de Busto y yo que voy más atrás, voy chuscado para allí, pero ya no queda nada, así que toca
hacer ladera. Ni subo, ni bajo. Así que ahí me quedo un buen rato. De mientras me pasan por encima Angel Pérez y algún otro. También Juan
Maiza, que sólo va un poco más alto que yo, pero pasa de quedarse en esta miseria.
A lo lejos, no veo a nadie. El grupo de cabeza ha desaparecido, pero creo que hacia abajo. El grupito de Angel y Juan están bajos y girando
miserias. Así que la posibilidad de que alguien haga más de 15 kms y la manga sea válida, empiezan a desvanecerse.
Esto cada vez está peor, empiezo a perder altura, ya ni la ladera sujeta. Me tengo que abrir un poco para asegurar aterrizaje, lo mismo
le pasa a Piolín, que estaba cerca. Cuando andamos eligiendo campa, como en un milagro de película, sale el sol. Algo se suelta, está muy
roto pero se le ve con ganas. Insistimos, no tiramos la toalla. Piolín sale un poco más afuera, yo aprovecho para cerrar un poco más el giro.
El grupo de Angel y Juan, nos ven y se vienen. Yo ya la tengo bien enroscada y la giro hasta 1600.
En ese momento veo esperanzas. Además a lo lejos veo una vela blanca que probablemente ya lleva 15 kms. Pero no me puedo arriesgar. Tengo
que asegurarme y hacer yo los 15 kms. Todos mis rivales ya han pinchado. Está en mi mano. Voy hacia las laderas de Miraveche, mejor
orientadas al viento. Voy por la ladera, sin prisa y sin apenas caer.
12 kms, 13 kms, 14 kms…..y sigo con suficiente altura. Esto está hecho!!!!!
Cuando ya veo los 15 kms, me abro al valle y me acerco a aterrizar junto a un pueblo. La zona se cerraba un poco, ya no tenía mucha
altura y es uno de esos días en los que no apetece andar. He hecho mi "trabajo". Ahora, a ver si el ordenador lo da todo por bueno.
Por cierto, que en esas me pasa Oskar González por encima y gana la manga con una EN-B. Por delante también estaba Asier Izco, la vela
blanca que había visto a lo lejos.
Después de descargar los GPS, Iñigo Redín me dice que la Liga Norte 2012 es mía. Oficiosamente todavía, a espera de algunos tracks y
posibles reclamaciones. ¿De verdad? ¿Esto está pasando de verdad?
Estoy un poco mareado.
Rodolfo Pérez Leunda
