Liga Norte 21-22 Abril 2007.Rappel

Escrito el 19th abril 2007 por AlasDeLeyre en PARAPENTE, Rapeladas

 

En Oña vamos a volar de coña, o en Oña no volamos ni de coña, o en Oña nos vamos a agarrar una moña, o mejor nos quedamos en Aloña. Vamos a ver cómo pintan las cosas para este finde.

 

La situación del mapa de isobaras tiene un cierto parecido con la semana pasada. Sobre el Atlántico hay una serie de borrascas que hacen soplar el viento del sur sobre el centro del Atlántico, aunque de forma no tan significativa como la semana pasada.

 

La Península se encuentra en un ni fu ni fa. A lo largo del fin de semana se van a ir sucediendo una serie de centros de altas y bajas presiones, aunque de eso van a tener poco más que el nombre y el gradiente de presiones va a ser en todo momento muy bajo. No podemos decir, por tanto, que nos encontremos bajo la influencia de ningún anticiclón o ninguna borrasca. En cualquier caso la presión absoluta va a ser bastante alta (nos va a rondar la isobara de 1020 durante los dos días), hay una ausencia total de frentes sobre nuestras cabezas, así que el tiempo va a estar estable, salvo un pequeñísimo riesgo de tormentas por la tarde.

 

Fijaos como mañana viernes todavía vamos a estar influidos por una vaguada que para el fin de semana se va a desplazar hacia el sur, en donde va a hacer tertulia con un frente cálido procedente del norte de África, y entre los dos les van a tocar un poco las narices a los que quieran volar en Sierra Nevada.

 

Por lo demás, no se ven embolsamientos de aire frío en altura (que con este tipo de mapas gustan de traer orondas tormentas) pero sí que se ve mucha humedad por allí. Esto quiere decir que ni el sábado ni el domingo parece que vayan a salir días radiantes. De hecho, la NOAA da una cobertura de nubes entre el 60 y el 80%, que se refiere precisamente a estas nubes altas. Las gotas de agua que da NOAA son totalmente de palo.

 

Lo siguiente, ¿de dónde va a soplar el viento? Ay, amigos. Ya sabéis que ésta es una pregunta que siempre tiene difícil respuesta, pero esta vez está más impredecible que las reacciones del chinorris de la Universidad de Virginia.

 

Bueno, la NOAA ya veis lo que da. Noreste para el sábado y sur o sureste para el domingo. Bueno, yo por llevarle la contraria a la NOAA, que me gusta más llevársela que a mi novia, voy a decir que también sur para el sábado, aunque sin tenerlas todas conmigo. Tampoco os creáis que los modelos las tienen todas consigo, y discrepan más que Acebes y Rubalcaba. Alguno incluso da ventorrete para el domingo, y aunque yo no creo que se ponga demasiado fuerte, ahí está la posibilidad. En cualquier caso, entre en el despegue de norte o de sur, sí que parece que el viento va a tener una componente clara de este, sobre todo el sábado, y esto habrá que tenerlo muy en cuanta a la hora de poner una manga en Oña. {mospagebreak}

 

¿Los techos? Vamos a ver. El sábado parece que la base de las nubes se situaría en unos 2.000m. Aunque no parece que haya mucha inestabilidad en las capas bajas (esto se suele traducir en térmicas suaves) ésta no desaparece hasta más arriba del nivel de condensación, por lo que es posible que en alguna zona se pudiera subir puntualmente por encima de esa altitud.

 

La situación prevista es muy similar el domingo, quizás con una miajilla más de altura que el sábado.

 

Pero, pero, pero… hay una cosa que me preocupa. La cosa es que ya os he dicho que no hay una inestabilidad muy grande en las capas bajas. Y también decíamos que hay serias probabilidades de tener el cielo velado por nubes altas. Si el velo se cierra lo suficiente, puede ocurrir que quede un día volable, pero más miserable que el tanga de Aramís Fuster. ¿Qué ocurrirá? Seamos optimistas y preparémonos para volar…

Liga Norte 17-18 Marzo 2007.Rappel

Escrito el 15th marzo 2007 por AlasDeLeyre en PARAPENTE, Rapeladas

 

 

 

Escrito por Rappel   
Jueves, 15 de Marzo de 2007 16:14

¡Hele, Kiyo! Vamos a por la primera rappelada de la temporada para Baigura.

Para variar, la cosa está que ni fu ni fa, aunque más fa que fu. Los vientos parece que sí que van a acompañar, pero no sé si la nubosidad que va a haber el fin de semana va a dejar alguna manga decente.

El mapa, pues muy típico de estas fechas. El anticiclón de las Azores afianzado en su sitio, aunque sin mucho fuste, y un montón de pequeñas borrascas y frentes pasado de oeste hacia este dejando más o menos de lado la Península. Lo más destacable, aunque esto es ya para principios de la semana que viene, un anticiclón que pasa por encima de Terranova, se divide en dos, de forma que junto con el de las Azores suman tres anticiclones alineados sobre el Atlántico, hasta Groenlandia.

 

Estos anticiclones preparan un buen sandwitch con las borrascas situadas en el norte y centro de Europa, de forma que dejan un pasillo de fuertes vientos que parten del punto donde Amundsen clavó la bandera para bajar directamente hasta nuestra casa arrastrando la pelusilla que en estas fechas sueltan los renos. Vamos, que como se cumpla el mapa previsto, allá por el martes vamos a morir todos y nuestros cadáveres serán devorados por los osos polares.

 

Pero esto es para el lunes y el martes. El fin de semana se presenta como unos días de transición, aunque especialmente el domingo ya parece que va a estar afectado por el frente frío que terminará de entrar el lunes.

 

El sábado quizás parece que vaya a estar algo más tranquilo, y aunque nuboso, no parece que la cosa vaya a pasar a mayores. El viento va a estar oeste por la mañana para rolar rápidamente a norte, y con tendencia a subir de intensidad por la tarde, pero sin terminar de ponerse cañero, aunque parece bastante probable que en Baigura entre al final de la tarde viento del mar. Hacia la costa la tendencia va a ser que el viento va a soplar más de oeste, así que cuidado con mandar la manga hacia allí, porque posiblemente no se consiga avanzar muy lejos.

 

El sondeo del sábado es muy parecido al que había la semana pasada. Marca una inversión muy fuerte a unos 1000m de altura, con el nivel de condensación prácticamente a la misma altura. La semana pasada en Baigura se pillaron los 1000m de altura. En Arrona también se pillaba esa altura y se trincaba con bastante dificultad cerca del suelo, pero a partir de cierta altura todo era más fácil, así que convenía volar alto sin dejarse perder demasiada altura. La cuestión es ver cuánta nubosidad habrá el sábado. Si os fijáis en el sondeo, también parece que va a haber algunas nubes altas velando el cielo. Si se abre un poco, que parece que sí, el día podría estar tan bonito como la semana pasada, si se cierra, pues…

 

El domingo va a estar más gris, y además de lo que haya por debajo, en las capas altas se va a notar ya la nubosidad típica previa al paso de un frente frío, así que no parece que la cosa vaya a estar para echar cohetes.

 

Y el lunes, no os olvidéis de la bufanda para ir al curro. Echadle un vistazo al mapa previsto, que merece la pena. Todavía faltan unos cuantos días y los mapas son bastante inciertos, pero como se cumplan las previsiones vamos a flipar.

 

Ewa se desmaya en un viaje hasta los 9000mts

Escrito el 16th febrero 2007 por AlasDeLeyre en PARAPENTE

EWA SE DESMAYA EN UN VIAJE HASTA LOS 9.000M

Una parapentista alemana ha sido aclamada “como la mujer más afortunada del mundo” tras sobrevivir en una tormenta que la aspiro a más altura que la cima del Everest durante un vuelo en el norte de Nueva Gales del Sur.

EWA SE DESMAYA EN UN VIAJE HASTA LOS 9.000M

Traducción de Iñigo Arizaga

By Drew Cratchley (http://www.news.com.au/story/0,23599,21236611-2,00.html )

Una parapentista alemana ha sido aclamada “como la mujer más afortunada del mundo” tras sobrevivir en una tormenta que la aspiro a más altura que la cima del Everest durante un vuelo en el norte de Nueva Gales del Sur. Ewa Wisnierska, de 35 años, paso 40 minutos inconsciente mientras era elevada hasta una altura aproximada de 9000m, en donde fue golpeada por granizo, evitó los rayos por los pelos y quedó cubierta de hielo.

Un parapentista chino de 40 años que fue succionado por la misma tormenta fue encontrado muerto ayer, un día después de su desaparición.

Los dos se encontraban entre los 200 parapentistas que tomaban parte en vuelos de entrenamiento el jueves, antes del Mundial de Parapente que tendrá lugar la semana próxima en Manilla (Australia), cuando se produjo la fuerte tormenta.

Ms Wisnierska dijo que fue incapaz de evitar la tormenta cuando se formó y se encontraba volando bien alta sobre el accidentado terreno. En la habitación de su hotel, en la que descansaba su cuerpo magullado y picado por las congelaciones Ms Wisnierska comento que “simplemente rezaba: por favor, por favor, llévame a algún lugar lejos de la nube”.

Mientras subía cada vez más alto en la atmósfera, hasta el equivalente de 300 m por encima del Everest, Ms Wisnierska notó que se formaba hielo en sus gafas y sus instrumentos, antes de perder el conocimiento a unos 6000m. Unos 40 minutos después, despertó y se encontró todavía inmersa en la tormenta, rodeada de oscuridad. {mospagebreak}

“Estaba temblando y todo eso, pero pensé que tenía que volar recto para salir de esa nube”, dijo, “pensé que necesitaba bajar para calentarme”.

A pesar de estar aturdida y confusa por la falta de oxígeno y tras conseguir al fin escapar de las nubes de tormenta, Ms Wisnierska centró toda su atención en volver al suelo. “Pensé: ¿dónde podré aterrizar? No podía ver ninguna carretera ni nada, pero entonces vi una pequeña granja e intenté volar hacia ella, y aterricé muy bien.

Incapaz de poner orden en su mente para pedir ayuda, esperó sola durante algunos minutos hasta que alguien de su equipo llamó por la radio y pudieron localizarla. Cuando la encontraron, aún estaba cubierta de hielo.

“No sé a quién dar gracias, di gracias a los ángeles, pero no creo en Dios”, dijo.

Godfrey Wenness, el organizador del campeonato de la semana que viene dijo que Ms Wisnierska es la mujer viva más afortunada del mundo. “Es como ganar a la Loto 10 veces seguidas. Esta chica es así de afortunada. Diría que ahora mismo es la mujer más afortunada del mundo, sin exagerar o ni ser sensacionalista. El chino murió, ella sobrevivió, no hay ninguna razón lógica para que ella se salvara”.

A pesar de las congelaciones en sus orejas y sus piernas, Mr. Wisnierska dice que aún  espera competir en el mundial. “Volar es demasiado fantástico como para dejarlo por un accidente”, dijo.

 

Ioar 9 Julio 2006.Iñigo Redín

Escrito el 9th julio 2006 por AlasDeLeyre en Cronicas, LIGA NORTE

Hoy sí, la cosa está más clara de norte. Lo cual, es un alivio, ya que, sin duda, no íbamos a subir a la sur. 

La rapelada augura un día flojillo, con nubes altas que nos taparán el sol, y vientos de nordeste, que, por la tarde, rolarán a noroeste.

Ya antes de subir, la prueba está decidida. Haremos la prueba reina de Ioar. Baliza en Lagrán, a 21 km hacia el oeste, vuelta a la ermita de Ibernalo, justo bajo el despegue, y gol en las piscinas. ¡Ojo!, con un radio de 400 metros.
De nuevo la prueba será cronometrada.

Hoy sí que está de norte desde el principio. Sin embargo, no vemos que los buitres triunfen mucho. Y la cosa no anima mucho a despegar.
No importa, conocemos la zona, y sabemos que tira bien, aunque sea un poco tarde. Así que, a esperar…

La prueba tiene un inicio de crono en un radio del despegue, 1 km. Cuando se sobrepase esa línea por última vez, comienza el tiempo. Así que, todo el tiempo que uno espere en el despegue, para coger altura, será bueno. Digo esto, porque sé de uno, que el año pasado metió la pata por no tenerlo en cuenta.

Una vez más, fue Ramón uno de los primeros en despegar. Miguel, cuando Ramón ya se ha escapado de la zona del despegue, sale a por él. Sin duda, a resarcirse de su resultado del día anterior.
Luego vamos Akitxo y yo (y más gente, por supuesto).

Como es tradición, los primeros kilómetros con el culo prieto. A escasos 200 metros del duro suelo, sigo con rumbo fijo a la térmica del pueblo de Cabredo, aunque, la verdad, no tengo muy claro que vaya a legar. Así que, cualquier cerillo del camino es girado como si fuese el último.

A lo lejos veo a Ramón, que se escapa, y ya está abordando el salto a Lapoblación. Le veo muy bajo, pero parece que no cae, e, incluso, sube.

La térmica de Cabredo es buena, cojo unos 1700, y veo cómo vienen hacia mí Akitxo y Robert con más gente.
Les dejo en la térmica subiendo, venían de abajo, y voy derecho al Puerto de Bernedo, al monte de Lapoblación, que está en el lado este de la carretera del puerto. Conmigo viene el bravo argentino, Marcelo.

Mientras, por delante, yacía el parapente de Miguel, en el suelo. Había escogido ir por el llano para cruzar esta zona complicadilla, y no había triunfado.

Marcelo se había abierto un poco más al norte que yo, buscando una térmica en el pueblo de Marañón. De cualquier manera, atrapamos a Ramón, que venía trincando desde el suelo, en la peña de Lapoblación.

Ahí estamos un rato los tres, intentando coger algo de altura para cruzar el barranco del Puerto de Bernedo.
Más que nada, porque quedarse en medio suponía no tener aterrizajes (bueno, había algo que parecía un aterrizaje), y tenía pinta de haber una pateada terrible.
Así que los tres, fuimos batante cautos.

¿Los tres?, no, ni de coña!!!
Primero fue Ramón, que con una mierdecilla de altura se atreve a cruzar el barranco, en busca de los trigales que hay al otro lado (por si había que pinchar allí). Según él, llegaba de sobra. A ver quién se lo rebate, porque, en efecto, llegó. Y, de sobra. De sobra porque no aterrizó, pero seguro que tenía agujetas en el culo después de esa transición.

Marcelo y yo hacemos un intento. No me fío, y me doy al vuelta. Marcelo va un poco más bajo que yo, y llega a un punto en el que no tiene marcha atrás.
Tendrá que trincar (cosa que se ve muy difícil) o aterrizar en esa zona.
Se ve un campo en donde puede aterrizar. Aterriza, desenreda la vela (cortando con su machete las matas), y empieza su odisea. 
Por cierto, para que conste, Marcelo aterrizó en el Regajo de Roñés, en la zona de la Comunería (se ve muy bien en el track si usáis un mapa de SIGPAC).

A todo esto, mientras Ramón nos tomaba la delantera, una legión de parapentes llega a la zona en donde yo estaba (cobardemente). Entre ellos, Akitxo y Robert.

Akitxo, tal como llega, consigue un unillo que le lleva a la parte alta de la cresta, y cruza rapidamente el puerto, por arriba, por el collado.
Yo aún hago otro intento de cruzar, y, de nuevo, vuelvo con el rabo entre las piernas. 
Finalmente, Robert y yo nos escapamos. Primero me adelanto yo, y, después, vendría él. Aquí empezaría nuestra carrera particular (relativa, ya que depende del crono) 
Cabe destacar que por ahí estaba Víctor, que, como todo Blas, estaba intentando remontar para escaparse.

Una vez ganada la cresta, todo es gratis. Casi no hace falta girar. Aunque, bien sabemos que, para hacer la baliza de Lagrán habrá que trincar algo, porque hay que abrirse al valle.

Ramón hace la baliza en primera posición. Tras él, Akitxo, y, a una buena distancia, Robert y yo, casi a la vez, tras un recorrido en el que alternábamos nuestras posiciones.

De la vuelta no hay mucho que decir, salvo que, una vez conseguidos unos metros al volver de Lagrán, es realmente fácil y rápida. 
Cuando los primeros, Akitxo y Ramón, pasan sobre el puerto de Bernedo, Marcelo sigue guerreando por ahí. Akitxo atrapa a Ramón justo después, a la altura de Marañón. 
Ramón, precisamente, nos avisa por radio que es muy fácil cruzar el puerto a la vuelta, así que Robert y yo, de carreras, no nos molestamos en trincar mucho.

Cuando nosotros llegamos al puerto, más de una hora después de la ida, Víctor sigue ahí, sólo, intentando remontar. Le digo que con la altura que tiene, ya pasa sin problema. Y, curiosamente, va y se fía. Luego aterrizaría en Lagrán, y quedaría quinto en la manga (sólo 7 pasamos el puerto).

Por delante, en el tramo final hacia la última baliza, la de la ermita de Ibernalo, Akitxo se escapa de Ramón. Ambos hacen la baliza, y llegan a gol sin mayor historia, llegando Akitxo 5 minutos antes que Ramón, aunque serían 14 según el crono.

En el tramo final, camino de Ibernalo, Robert se me escapa un poco. Esto ya lo he vivido antes, así que voy de listillo, y como sé que la zona que nos queda tira mucho (más aún con más calor), me la juego, y no giro nada de nada.
Búho, por radio, nos dice que el tramo final es con viento en contra, que aseguremos altura en la ermita.
Yo no pienso hacer caso, me la jugaré, porque siempre ha tirado mucho la zona que hay entre la ermita y el gol en las piscinas. Aunque, en otras ocasiones, ese gol es de 1000 metros de radio, y hoy es de 400.

Voy detrás de Robert, y, ¡oh, la lá!, veo que se para a trincar. Tengo 300 metros de desnivel para hacer 2,5 km, y con un viento en contra de unos 20 km/h. La cosa va a estar complicadilla, ¿no? 
¡Qué importa!, si la cago, pues cagada, y ya está.
Me piro. Paso sobre Santa Cruz con 200 metros, me faltan 1,3 km. ¿Llegaré?. Piso el acelerador, pero, lo suelto cuando hay ascendencias que me echan una mano, voy cabalgando.
Finalmente aterrizo a 370 m de gol, o sea, ¡¡¡en gol!!!

Robert, me imagino, estará rabiando al verme. Le oigo que pregunta por radio si he hecho o no gol. Yo mismo le respondo: "chincha, chincha, he llegadooo".

Finalmente le sacaría poco más de 4 minutos. Que, en realidad, no me ponían por delante de él, sino más cerca por detrás, ya que me sacó 4 minutos en la clasificación de la manga.
Ramón me sacó 1 minuto, aterrizando 9 antes.
Cosas de las mangas con cronómetro individual.

Al final, otro día bueno, 42 km con un día que no era para tirar cohetes, pero se puso la manga perfecta.
Mucha gente pinchada en la parte este del Puerto de Bernedo, y 3 pilotos más, Víctor, Ongi y Miguel, que pasaron el puerto, e hicieron más de 11 km. Y Akitxo, como nos dijo por radio, al fin, ganaría una manga de Liga Norte.

¡Ah!, ¡coño!, ¿y Marcelo?, que lo hemos dejado en el barranco. Yo me fui a casa, y él seguía sin aparecer. Al final, contactaron con él, y le rescataron. Sólo estuvo 4 horas pateando la zona. Su machete, para el arrastre, ya que, según sus propias palabras, lo tuvo que utilizar para abrirse paso entre las zarzas de 2 metros.
Anda que no hemos echado risas. A ver si se anima y nos escribe unas líneas aquí también.

Pues nada, otra vez más y mejor.

 

Íñigo Redín

Ioar 8 Julio 2006.Iñigo Redín

Escrito el 8th julio 2006 por AlasDeLeyre en Cronicas, LIGA NORTE

 

 

 

De nuevo en Ioar. Tras los logros de Búho con los todo terrenos, una vez más, nos arriesgamos y venimos a volar aquí. ¿Por qué?, pues porque a pesar de las incomodidades, es una zona que nunca falla. De hecho, las pocas veces que no hemos volado, ha sido por vagancia nuestra (para no subir al despegue sur). 
Además, el amigo Búho había conseguido coches y conductores, tanto para subirnos al despegue, como para la recogida.
El resto, ya se aprenderá con la experiencia…

La previsión no pintaba mal, según Rappel. Lo único, que no quedaba muy claro de dónde iba a venir el viento.
En caso de venir de sur, estaba previsto despegar de un lugar "nuevo", al oeste de las antenas. 
Parte de los pilotos subieron (por orden, desde el campo de fútbol, en todoterrenos). Sin embargo, el despegue no gustó mucho, así que, en vista de que no había viento, decidimos bajar al despegue habitual de norte.

Cuando llegamos, el típico toreo. Entraba de atrás. Aunque suave; siempre molesta, ¿no?.

Se decidió la prueba. Un gol lejos, hacia el sureste, confiando en que, en el Valle del Ebro, soplase algo de noroeste.
La prueba era: baliza en Cabredo, a 7 km del despegue, y, desde ahí, gol en Andosilla, a 48 km, totalizando 54,5 km.

Tuvimos que poner la salida cronometrada, como también es tradición aquí. La carrera empezaba al hacer la baliza de Cabredo, mejor dicho, al salir de la baliza.

El primero en salir de la zona del despegue: Ramón. Seguramente él no quería salir tan rápido, pero no tuvo más remedio, al quedarse algo bajo. Tras él, Iván y Akitxo. 
Todo el mundo circula con mucha precaución (excepto Ramón). De momento el techo no es muy alto, y nadie se fía. Más de uno se quedó tirado en la primera parte de la prueba, antes de hacer la baliza de Cabredo.

Ramón es el primero en hacer la baliza, con bastante distancia sobre el resto, aunque, com decía antes, al ser cronometrada, esto no importa, ya que el tiempo se cuenta al salir de la baliza, no del despegue. 
Robert está a punto de pinchar, teniéndose que escapar hacia el norte. Sale del mismísimo suelo (90 metros sobre la tierra ardiente), y se escapa.
Mientras, Paco sigue en el despegue, con pocas ganas…

Ramón se ha entretenido algo intentando trincar, así que Akitxo e Iván le adelantan.
Por fin, Paco se atreve a slair de la zona del despegue.

Cuando Robert y Paco hacen la baliza, los primeros ya se han cruzado toda la Sierra de Codés. Todos procurábamos ir por la cara sur, aprovechando la insolación y el escaso viento que había (ligerísimo del nordeste).

Yo hice la baliza con Marcelo. En esta baliza suele haber una térmica, y, en efecto, allí estaba (no la hicimos muy sobrados tampoco).
Ambos salimos de la baliza a la vez, con unos 1.700 metros. Aunque él se tiró a las crestas del sur, sobre Aguilar de Codés, y yo preferí mantenerme en la seguidad de las paredes de la Sierra de Codés.
Tanto Robert como Paco, escogieron la "ruta del sur", la ruta directa a la baliza. Cabe destacar que, por esta zona, Robert hizo el techo del día, llegó casi a 2.900 metros. Algo que yo ni olí en todo el vuelo. 
Entretanto, Iván se escaba ya de la sierra, con unos nada despreciables 2.500 metros, partiendo desde el extremo oriental. Con él, por detrás Akitxo, con 200 metros menos, y un poco después, Ramón, que sale de la sierra sin llegar hasta el final.

Cuando iba yo tranquilamente sobre la cresta, tuve unos meneos rarillos, que me obligaron a escoger una vertiente, al quedarme bajo. Me desvié a la cara norte (me daba más seguridad, porque aún había gente volando por ahí).
En un momento dado se me planteó la duda de si seguía por la norte hasta el despegue, o aprovechaba el collado al este del Ioar para pasar a la sur. Tomé esta segunda opción, pasando muy bajo por el collado, pero, como no había viento… Aunque, eso sí, pasé justo, muy pero que muy justo: ¡¡¡20 metros!!!
Cuando gané la cara sur, por la zona del despegue sur, tardé un poco en remontar, pero, al final, un buen pepino me puso a 2300 metros, altura que creí suficiente para escaparme de la sierra.

Hacia el gol, a lo lejos (aunque no debía ser muy lejos, ya que mi vista de lince me permitía verlos), veía a Akitxo y Ramón. Iván ya se había pirado.

El día era de los que me gustan, de "cansa-almas", girarlo todo, y asegurar techos. Lo importante, para mí, era llegar, no llegar pronto.
Al salir de la sierra, comienza un nuevo vuelo, de llano. Estábamos en "Piedrahita", sin viento, y con menos techo, pero era un vuelo cómodo.

Como era bastante tarde, era buena hora para volar por un llano sobrecalentado (abajo hacía unos 34 grados). Así que me puse el chip de vuelo en llano, y fui en busca de pueblos, y zonas en las que, los libros, dicen que hay térmicas. Más que nada porque estaba más solo que la una.

Yo atrapaba a Akitxo y Ramón, pero éstos me dejaban atrás siempre, porque siempre les pillaba tarde, cuando ellos se escapaban de la térmica
Un poco más al sur transitaban Paco, primero, y Robert.

Iván va solo en cabeza, con una buena ventaja sobre el resto, camino de Sesma.
Akitxo, y Ramón, casi conmigo, pero más altos, pasan algo al oeste de Los Arcos, aunque yo decido irme sobre el pueblo, ya que no tengo mucha altura. Y consigo trincar algo que me saca de la zona. Eso sí, ese algo era realmente flojo.

Todos seguimos una línea. Unos, la línea del suelo, la carretera. Mientras que los otros siguen la línea recta del GPS, desde la mismísima baliza.

Iván, poseso, va hacia Sesma, buscando los aires calientes del pueblo. Al ver que no funciona, sigue el correueblos, con destino a Lodosa
A estas alturas, por detrás, vamos los tres mosqueteros (Akitxo, Ramón y yo), y, ahora sí, estamos los tres juntos. Ramón me grita algo girando una térmica: -"Estoy sin variooooooooo". Jodé, con el tío, sin vario y sigue aquí. Desde entonces, Ramón sería mi sombra (la mía, porque Akitxo se nos escapa).
Giramos mucho, mucho, intentando asegurar un escaso techo. Akitxo no tiene la paciencia suficiente, y se escapa hacia Sesma antes que nosotros. Nosotros aún trincaríamos unos 250 metros más que él.
Los cuales nos sirvieron para llegar a Sesma mas holgados, y, además, teniendo a Akitxo por delante, para ver si se subia en algún lado.
Lo que conseguimos ver, al menos desde nuestra perspectiva, era cómo se arrastraba, de campo en campo, buscando tractores, paja, casas, lo que sea, que le diera un impulso hacia arriba.

Por el sur, los otros tres, Iván, Paco y Robert estaban pinchando, a unos 8 km del gol.

Aquí me había destacado un poco de Ramón, al no poder girar él bien las térmicas (el varioooo), y le llevaba unos metros de altura de diferencia.
Pasamos Sesma, en busca de una zona de monte oscuro que hay al este, y que continúa, por cierto, casi hasta el gol.
Y sí, ¡funciona!. Hago el techo, unos 2100, distanciándome bastante de Ramón, que giraba con el gps. Por debajo veo que Akitxo también ha venido a esta térmica, aunque creo que llegaría demasiado tarde.

Al final, me escapo de esa útima térmica, que, con un planeo de 14 km me pondría en el gol. Por detrás llega también Ramón, que, ha cubierto los últimos 30 km sin vario. Nada mal, ¿no?
Akitxo se quedaría en Carcar, a escasos 2,5 km de gol (tenía un radio de 1 km).

 

Saqué media hora a Ramón, según el crono, ya que él hizo mucho antes el inicio de carrera. Al gol llegué 7 minutos antes que Ramón. Él, a las 19:24, y el gol se cerraba a las 19:30. ¡Ufff!, ¡por los pelos!

Un dia estupendo. Muy cómodo para volar, y muy fácil (me refiero al viento). 
Creo que es la primera vez que vuelo en el valle del Ebro sin que haya nada de viento, absolutamente nada. Todos los molinos parados, ¡increíble!.
No está mal, dos pilotos en gol, con 54 km, otros 4 con más de 40 km, y 7 más con más de 20.

Íñigo Redín

Baigura 4 Junio 2006.Iñigo Redín

Escrito el 4th junio 2006 por AlasDeLeyre en Cronicas, LIGA NORTE

 

 

 Las previsiones eran buenas. Algo peores que el día anterior en cuanto a techos, pero mejores en cuanto a los vientos.

Se planteó, por consejo de los gurús de Bera, una bonita prueba, con una baliza en el aeródromo de Itxassou, en plena térmica, y gol en Bera de Bidasoa. Una manga de poco más de 33 km, siempre hacia el oeste. Muy bonita y, sobretodo, novedosa.

El despegue está muy peliagudillo. Mejor dicho, el despegue está bien, pero lo que está peliagudo es remontar.
Aunque, al poco de despegar casi todos los pilotos, el viento se pone graciosín, y empieza a tirar de sur. También tira de este, de vez en cuando.
Se dio la situación curiosa de que los pilotos más tardones (alguno subieron casi 2 horas más tarde que el resto), estaban parados en el despegue, sin poder despegar, por entrar el viento de sur, mientras que un montón de pilotos intentaban remontar en la cara norte del despegue, sin tener sotavento alguno.
Creo que a esto se le llama "flojo variable".

Tras más 90 minutos agónicos en la térmica del despegue, o alrededores, varios valientes consiguen trincar algo, y largarse hacia el start point: Xabi, Miguel, Iván, Federique…
¡Ah!, no, falsa alarma. no se atreven. Habrá que esperar una mejor ocasión.

Esta vez sí, Sebastien Begu se escapa el primero, y tras él salen Xabi, Miguel y Chus Blanco.tras ellos salen Robert y Ramón. Y, a por ellos, raudo y veloz, Akitxo.

A pesar de ir Xabi en cabeza, un error hizo que pasara de la baliza, y siguiera al sur, hacia el gol. Esto benefició a Miguel, que hizo el primero la baliza, seguido de Chus y Ramón.
Xabi, mientras, volvía contra el viento a hacer la baliza.

Todos los que hacen la baliza se tiran como posesos hacia las crestas que hay al oeste del Paso de Roland. De ahí sale el primero Chus, tras él Miguel y Sebastien. Todos a unos 1000 metros de altura.

Detrás de ellos Iván y Dani Tena. Iván tiene un punto bajo, y casi pincha cerca de la baliza.

Mientras, por detrás, muy por detrás, yo, último en el gol, consigo despegar. El despegue estaba muy mal, y había que despegar por la cresta, hacia el este. Sólo me llevaban 20 km de ventaja.

Todos siguen la misma ruta, la recta, con un ligero desvió hacia el sur, hacia Zugarramurdi, para coger la sierra que lleva directamente al gol. A pesar de que es un recorrido algo más largo que ir en línea recta, evitas ir por el llano, que no parece que de mucha confianza.

Miguel que va un poco más abierto y más alto que el resto, consigue adelantar a los primeros. Ramón le ve, y sale a su rueda. 
Robert, acostumbrado al llano, escoge la ruta rápida, e intenta ir por el llano, pero, finalmente tiene que recular e irse al sur, a la montaña.

Prácticamente se puede ir al gol haciendo termoladera. El tramo final de la prueba es muy fácil, y todos los pilotos (casi) consiguen llegar a gol. Quiero decir, todos los que habían llegado a esa zona.

Yo, mientras los primeros ya están en gol, a 20 km de mí, estoy trincando para hacer la baliza del aeródromo. Trinco una térmica muy gorda (puede que fuera un +2), que, creo, rompe la inversión, y me da unas maravillosas vistas, sobre la bruma, de la inversión del Pirineo, y del mar.

A pesar de su cagadilla en la baliza, Xabi consigue entrar tercero, por delante de Chus, a 10 segundos.
Después, Robert e Iván, que ha pisado para pillar al grupo.
A continuación hay 5 pilotos más, que aún están en las laderas. 
Yo, como he trincado mucho, me puedo permitir el lujo de ir recto hacia el gol, y, gracias al techo que he cogido en la baliza, me acerco a los pilotos que me preceden.

También hago el intento de ir recto al gol, a ver si pillo algo por el camino, en el llano, pero, con el rabo entre las piernas, y a punto de pinchar, me tengo que girar hacia la ladera (se ve muy bien en el track, en azul, en la imagen que acompaña estas líneas).

Al terminar la ladera había un collado, que daba paso al valle en donde está Bera. Por supuesto, los beratarras sabían que con la altura del collado llegaban al gol sin ningún problema. Unido esto a la falta de viento, en esa zona, que no creaba sotaventos.

Pero, eso sí, en cuanto pasabas, además de no caer, subías como un cohete. No habia viento porque la mole de La Rhune nos protege del mismo, provocando un buen pepino a sotavento. 
Al llegar a gol, más bajos, y sin protección d ela montaña, nos dimos cuenta del ventarrón de norte que había. Según los locales, nada normal. Pero, bueno, sin consecuencias.

 

Total, una manga muy bonita, con mucha gente en gol, y todos contentos. La recogida, bastante bien.

Yo, personalmente, bastante contento también, porque casi pincho junto al despegue. Y, se ve que tras echar mil juramentos, provoqué la térmica.A pesar de ir tan tarde y solo, pude llegar a gol, aunque fuera a 48 minutos del primero.

 

Pues nada, volveremos!!!

 

Íñigo Redín