Arangoiti 26 Mayo 2001.Iñigo Arizaga

Escrito el: 26th mayo 2001 por AlasDeLeyre en Cronicas, LIGA NORTE

 

Comentario 1ª manga Liga Norte

El sábado se veía que soplaba el norte desde la mañana, aunque todo el rato la brisa de sur estuvo intentando llevarse el gato al agua. Yo estuve en el despegue sur a eso de la una del mediodía, y la cosa estaba tal cual la definía Ibón: "si hay que despegar se despega, pero despegar por despegar, es tontería".

Al final, decidimos despegar a norte. La manga que se ha puesto consiste en una primera baliza en Lumbier, pasando luego al sur de la Sierra de Arangoiti hasta Sos del Rey Católico, con la intención de aprovechar el viento norte en este trayecto y desde aquí hasta Luesia (dirección sudeste), en donde hay una concentración de parapentes y desde Sos es previsible que nos encontremos con la ayuda del cierzo. En total eran 46,8 Km

En el despegue hay norte flojo y en el aire las térmicas son bastante débiles y están tumbadas por el viento. Nos lanzamos todos en pelotón hacia la primera baliza, que estaba en las piscinas de Lumbier. Por la ladera el vuelo es sencillo, porque hay muchas térmicas en las que apoyarse. Solamente hay que tener cuidado de no salirse por el sotavento de las térmicas, porque las descendencias unidas al viento en contra pueden dejarte un poco tiradillo sobre la cresta. De hecho, hubo quien saltó a sotavento hacia la segunda baliza obligado por esta circunstancia, ya que era incapaz de avanzar hacia el norte.

Con el paso del tiempo el viento meteo de norte fue aumentando y la situación fue empeorando. Si al ir a la baliza el techo estaba por encima de los 1.600, a la vuelta yo fui incapaz de trincar más de 1.400 m y con esta altura, derivando un cero, me pasé hacia el sur de la sierra. El sotavento no estaba nada fiero, pese a no pasarlo con demasiada altura. La gente que despegó más tarde, a duras penas pudo hacer la primera baliza.

La situación en el valle, al otro lado de la sierra no era mucho mejor. Las térmicas aún más tumbadas, más flojas y el techo más bajo. Por delante iban Iñigo Redín y Iñigo Egaña, a quienes veía girando una mierdilla algo más adelante que yo. Después de perder el tiempo con un cero, decidí lanzarme a pillar la misma térmica que ellos. Llegué bajo, demasiado bajo para poder girar alguna ascendencia aprovechable, y cuando me puse a girar para buscar algo, me di cuenta que el viento estaba demasiado fuerte cerca del suelo como para intentar nada. Caí algún kilómetro más adelante, camino de la baliza de Sos del Rey Católico.

Los otros dos Iñigos siguieron un rato sin pena ni gloria en aquella térmica, y finalmente se lanzaron a por la baliza. Iñigo Egaña encontró algo por el camino y remontó bastante, y ya en Sos esta altura adicional le permitió volver a tomar altura, mientras que Iñigo Redín, que llegó más bajo, se fue al suelo cerca de la baliza.

Desde allí, Iñigo Egaña se marchó en solitario hacia el gol de Luesia, pero un despiste con el GPS le hizo desviarse de la ruta, y para cuando se dio cuenta, le resultó imposible volver hacia ella por causa del viento. Una pena, porque el vuelo ya olía a gol. Iñigo Egaña recorrió 31,4 de los 46,8 Km de la prueba e Iñigo Redín se quedó un poco después de la baliza de Sos del Rey Católico. Fueron los únicos pilotos en hacer esta baliza.

Personalmente, me quedó la impresión de que fue una pena de manga, porque pienso que se podía haber completado, pese al viento reinante, que destrozó las condiciones del día.

 

 

Íñigo Arizaga